28.11.06


La Observación del día 19 de Noviembre fue decidida en un instante; José María me avisó que iba a Cerro Negro y como yo tenía muchas ganas de una noche oscura de luna nueva, pues ¡adelante!. Salimos a las 21:30 y al llegar -no hacía demasiado frío- soplaba a veces la brisilla canalla, pero pasaba pronto.

Mientras J.Mª, instalaba su nuevo radiotelescopio, yo planté mis prisma y tras el chocolatillo y algo sólido, me dediqué enseguida a M45 -las Pléyades- que estaban muy cómodas. El resto del cielo era una maravilla. Pasé luego al cinturón de Orión y en el tahalí pude afinar bien los prisma para conseguir ver tres de la M42 o famoso trapecio. La cuarta me dijo José María que hay que resolverla con telescopio.

Después pasé a Pegaso, que creo que por su extensión, me cuesta trabajo reconocer, pero anoche, partiendo de δ delta de Pegaso –es a la vez α alfa de Andrómeda- conté hacia fuera dos y a la tercera β beta, desviándome algo a la derecha, encontré M31 o galaxia Andrómeda; las dos galaxias compañeras no las pude precisar con los prisma, aunque el libro dice que sí porque M32 está totalmente pegada a M31. Estuve un rato contemplándola y me daban escalofríos al pensar que está a 2.300 millones de años luz de nosotros.

Encontré ayudada por J.Mª, la constelación del Triángulo; Cabellera de Berenice y El Pesebre en Cáncer, constelación que es difícil reconocer pues dibuja tenue. En todo el tiempo los meteoros no dejaban de pasar viendo varios bastante largos; la nueva instalación de J.Mª no dejaba de registrar aún los más débiles ya que recoge el mínimo vuelo de una mosca. Le daba tiempo, también, de hacer algunas fotos del estreno y alguna para la página pues estoy en ella sin los prisma. Otros tientos de chocolate y más ropa al estilo cebolla, nos ayudaban a entrar un poco en calor.

Empezaba a aparecer la cabeza de Leo y jugando a despistar aparecía también Saturno al que pude -con voluntad y ajustando mucho los prisma- no distinguirle la división Cassini, pero sí verle la forma ovalada que la posición de sus anillos le daba.

Otro buen rato me dediqué a la Osa Mayor que ya estaba completa a la vista, también a la Osa Menor a la que también pude desdoblarle una de las estrellas del lado derecho del carrito; estos detalles los estudiaré un poco más en la próxima.

Estando ya bien dibujado Leo y teniendo José María una buena recolección de meteoritos, acordamos recoger y a las 6 estábamos ya en Sevilla.

24.11.06

La obervación del 17 de Noviembre, fue estupenda; aunque pensábamos que seríamos pocos después nos encontramos allí: Salvador Fernández, José María, Javier-Inés-sus-dos-niños, Willy, Isabel y yo. A la llegada había un cielo estupendo, unas pocas nubes que se disiparon enseguida dejándonos a la vista la hermosa Vía Láctea. Enseguida enfoqué mis prisma hacia Las Pléyades -como siempre hermosas- para pasar enseguida a buscar la galaxia de Andrómeda, que ya empiezo a distinguirla a la vista, aunque con el trabajo de encontrar antes a Pegaso. Estuve un rato viendo las otras constelaciones del otoño, Acuario y Capricornio y fijé la localización de Fomalhaut perteneciente a la del Pez Austral. Como hacía bastante frío, pronto empezamos a sacar los calditos calientes y diversos sólidos que, junto con la charla y risas, ayudaban a espantar al frío. Lo espantamos y seguimos observando otro buen rato, pero lo que no pudimos espantar fue a un manto de nubes que se nos vino de pronto, dejándonos con un buen apagón encima y tan espantados a nosotros, que recogimos rápidamente y sobre la 1 en casa. Por el camino pude ver a Orión que se dibujaba ya completo.

Completo se dibujaba también, la noche del 10 Noviembre frente a mi ventana; había vuelto tarde de la inauguración de la exposición de Nicolás Fontanillas. Pinturas y dibujos muy bonitos de los que me gustaría poder comprar alguno. También de los de otro pintor, cuya exposición he visto en el mes de Octubre (Teno) que tiene unas serigrafías del Quijote que me gustaron muchísimo. Pero mi economía no está para trotes. Aunque Octavio del Banco, me asegura que no tendré problemas, que pida, ingenua sería si pienso que los intereses me los van a regalar.

Un regalo que ha gustado mucho, los dvd de la visita del Renacimiento y la del día de Osuna. Las músicas que les he puesto le van muy bien y quedan, junto a las fotos, bien lucidos. A Roque y Rafi también se los di, aún no los han visto, y él me obsequió con un párrafo en latín muy bonito: “Hominus, dum docent, discunt”, (Los hombres, enseñando aprenden), Séneca.